Características de las Normas Religiosas

Se le llama normas religiosas a las reglas que permiten la definición de los hábitos y el comportamiento de los que practican una doctrina teológica, relacionada a Dios y a la fe, con el propósito de obtener una unión en común entre cada una de las personas que la practican.

Cada religión posee sus normas propias y estas suelen permanecer inalterables a través del tiempo porque se determinan por los textos sagrados, como el Corán o la Biblia, los cuales son revelaciones de espíritus superiores que expresan la voluntad de Dios.

Los practicantes religiosos que no cumplen con las normas que una doctrina determinada establece se consideran desobedientes, en casos severos se les llama pecadores. Pero actualmente la teología está siendo reinterpretada y examinada de acuerdo a sus normas, basándose en la evolución de las sociedades y en conocimientos recientes.

Características Generales de las Normas Religiosas


Son unilaterales

Características de las Normas ReligiosasLas normas religiosas son unilaterales porque no hay un tercero con autoridad de exigir que las normas se cumplan. Eso significa que todo creyente está obligado a cumplir con las pautas que se indican, pero no existe una exigencia directa por otra persona. El compromiso de cumplir las normas religiosas se asume por cada creyente.

Son irrenunciables

Las normas religiosas deben ser cumplidas de manera obligatoria. Este cumplimiento se relaciona a que los creyentes se acercan a la doctrina y al Dios que se venera en la misma.

En las normas de características religiosas se determina claramente lo que le ocurre a una persona al no seguir las pautas específicas. Normalmente las sanciones tienen que ver con las condiciones de vida que tendrá la persona luego de morir o de tener poca prosperidad y felicidad mientras aun vive. El castigo se ejecuta por el Dios o ente superior que se venera.

Son internas

  • El cumplir con las normas religiosas no es expresado principalmente de forma externa, sino que se relaciona más a algún nivel de conciencia interna a través del cual la persona toma la decisión de adoptar ese comportamiento. No es exclusivamente necesario demostrar el cumplimiento de las normas religiosas expresando acciones en específico.
  • Aunque a grandes rasgos esto suele suceder en varias manifestaciones, pero la naturaleza que caracteriza las normas religiosas está más relacionada a una acción interna.

Son incoercibles

Ninguna persona obliga a ningún creyente a cumplir con las normas religiosas. Aparte de la descripción de los castigos detallados en la norma, no hay ninguna instancia con la cual una persona esté obligada a realizar las pautas a la fuerza. Esto significa que todo creyente decide seguir las normas esclarecidas en el reglamento de su religión por voluntad propia.

Son heterónomas

Esta característica se relaciona con el hecho de que este tipo de normas se dictan a través de un tercero, el cual tuvo conocimiento de estas a través de una revelación. Por esta razón el creyente no tiene autoridad alguna para cambiar las reglas o para añadir otras nuevas, lo único que puede hacer es cumplir con las mismas tal y como han sido especificadas.

De igual manera, el valor que estas reglas tienen también es otorgado por la persona o sujeto que las diseñó. Es decir que el creyente tampoco puede restar o agregar valor al cuerpo de la norma.

Evolución de las Normas Religiosas

  • Toda religión tiene algún tipo de influencia en la cultura, en la práctica y en las demás culturas alrededor del mundo. Ya sea porque comparten sus ideas o porque entienden que estas son inaceptables. Esto significa que algunas normas religiosas pueden usarse como parámetros de referencia para normas jurídicas o conductas aceptadas en una sociedad. Aún así, actualmente la evolución de la humanidad globalizada y las distintas revoluciones sociales han permitido que algunas costumbres y tradiciones religiosas que se instauraron de forma arbitraria sean reinterpretadas y cuestionadas.
  • Un ejemplo de todo esto es aceptar la diversidad de géneros en la ley y como consecuencia, en algunas instituciones religiosas.
  • A pesar de que un individuo no practique una religión o un credo, este puede respetar las creencias de los demás y convivir en armonía con ellos. Las distintas religiones intentan alcanzar este interés en común y también los intereses particulares, tales como conseguir más adeptos a su doctrina.

Deja un comentario